Textos Griegos

Plinio, VII, 154
"El poeta Anacreonte dio a Argantonios, rey de los tartesios, ciento cincuenta años".

Plinio, NH, III, 8.
“...Carteia, llamada por los griegos Tartessos”.

Plinio, NH, III, 13.
“La comarca que se extiende más allá de la que limita el Betis, acabada de describir, y que llega hasta el Anas, se llama Beturia y se divide en dos partes y otras tantas gentes: los celtas, que lindan con Lusitania, y que pertenecen al Convento Hispalense, y los túrdulos, que limitan con la Lusitania y la Tarraconense, pero que dependen de la jurisdicción de Córdoba”.

Plinio, NH, III, 119-120.
“Frente a la Celtiberia hay varias islas a las que los griegos llaman Cassitérides por su abundancia en plomo, y ante el promontorio de la región de los arrotrebos álzanse seis islas de los dioses, que algunos llamaron Afortunadas, Al comienzo de la Bética y a 25.000 pasos de la boca del Estrecho hállase Gades, que tiene una longitud, según escribió Polibio, de 12.000 pasos y una anchura de 3.000. En la parte donde se aproxima más a la tierra firme dista de ésta menos de 700 pies, pero en las restantes se aleja en más de 7.000. Su extensión es de 15.000. Tienen un opidum que goza de los beneficios del derecho romano, al que se llama Augustana Urbs Iulia Gaditana. En la parte que mira a Hispania y aproximadamente a 100 pasos hay otra isla de 1.000 pasos de longitud y otros 1.000 de anchura, en la cual antiguamente estuvo el opidum de Gades. Es llamada Eritea por Éforo y Filístides, por Timeo y Sileno Afrodisio, y por los naturales Insula Iunonis. Según Timeo, la mayor fue llamada Cotinusa por sus olivos. Nosotros la llamamos Tartessos, mas los púnicos Gadir, lo que en lengua púnica significa reducto. Fue llamada Eritea porque los tirios, sus aborígenes, se decían oriundos del Mar Eriteo. Según opinión de algunos, aquí vivió en otro tiempo Gerión, al que Hércules arrebató los ganados; pero hay quienes creen que esta isla es otra, a la que colocan frente a la Lusitania y la citaban allí antes con el mismo nombre”.

Plinio, IV, 120
“...nosotros la llamamos Tartessos y los púnicos Gadir, lo que en lengua púnica significaba reducto".

Plinio, NH, VII, 156
 “Pero vayamos a casos ciertos: es poco más o menos verdad que Argantonio el gaditano reino ochenta años, y se cree que comenzó a reinar en el cuadragésimo de su vida”.

Hecateo, FGrH, I, 138
"Tartessos, ciudad de Iberia nombrada por el río que fluye de la montaña de la plata, río que arrastra también estaño".


Estrabón, III, 2, 11.
Parece ser que en tiempos anteriores llamose al Betis Tartessos y a Gadir y a las islas vecinas Eritea. Asi se explica que Estesicoto, hablando del pastor Gerión, dijese que habia nacido «casi enfrente de la ilustre Eritea, junto a las fuentes inmensas de Tartessos, de raíces argénteas, en un escondrijo de la peña». Y como el rio posee dos desembocadulas, dicese también que la ciudad de Tartessos, homónima del rio, estuvo edificada antiguamente en la tierra sita entre ambas, siendo llamada esta region Tartessos, la que ahora habitan los túdulos. Eratóstenes acostumbra a llamar Tartessos a la region cercana a Calpe y a Eritea "isla afortunada". Mas Altemidoro opinando en contra, afirma que es esto falso, como lo es que de Gadir al Cabo Sagrado haya cinco dias de navegación, cuando la distancia efectiva no pasa de mil setecientos estadios.

Estrabón, III, 2,14
"...no desearía ni el cuerno de Amaltea, ni reinar ciento cincuenta años en Tartessos".

Escimno de Quíos, 164-166
"Tartessos, ciudad ilustre, que trae el estaño arrastrado por el río desde la Céltica, así como oro y cobre en mayor abundancia".

Pomponio Mela, II, 95.
“A continuación la mar se hace muy angosta, y las costas de Europa y Africa se aproximan, formando los montes de Abila y Calpe, que, como dijimos, constituyen las Columnas de Heracles; ambos entran casi por completo en medio del mar, sobre todo el de Calpe. Este tiene la particularidad notable de ser cóncavo; casi en medio del lado occidental hay una abertura que luego, al aumentar su ensanchamiento, se hace fácilmente practicable en casi toda su longitud. Más adelante se abre un golfo en el cual está Carteia, ciudad habitada por fenicios trasladados de Africa, que algunos creen que es la antigua Tartessos...”

Pomponio Mela, III, 46-47
 “Cerca del litoral que acabamos de costear en el ángulo de la Bética, se hallan muchas islas poco conocidas y hasta sin nombre; pero entre ellas la que no conviene olvidar es la de Gades, que confina con el Estrecho y se halla separada del continente por un pequeño brazo de mar semejante a un río. De lado de la tierra firme es casi recta; del lado que mira al mar se eleva y forma, en medio de la costa, una curva, terminada por dos promontorios, en uno de los cuales hay una ciudad floreciente del mismo nombre que la isla, y en el otro un templo de Hércules egipcio, célebre por sus fundadores, por su veneración por su antigüedad y por sus riquezas. Fue construido por los tirios; su santidad estriba en el hecho de guardar las cenizas (de Hércules); los años que tienen se cuentan desde la guerra de Troya. Sus riquezas son los productos del tiempo. En Lusitania está Eritía, que, según nos informaron fue la mansión de Gerión, y algunas islas más que no tienen nombres particulares...”

Ps. Aristóteles, mir., 135.
“Se dice que los primeros fenicios que llagaron por mar hasta Tartessos volvieron, a cambio de aceite y la pacotilla que habían llevado consigo, con tal cargamento de plata que no podían tener ni recibir más, viéndose obligados, al volver de aquellos parajes, a fundir en plata todas aquellas cosas de que se servían, incluso las anclas”.

Pausanias, VI, 19, 3.
“El Tartessos, dicen, es un río del país de los Iberos que da al mar por dos bocas, y hay una ciudad del mismo nombre en medio de las bocas de él. Es el río mayor de Iberia y como recibe la marea, los de después le han llamado Betis. Algunos creen que la ciudad ibera de Carpia se llamó antiguamente Tartessos”.

Esteban de Bizáncio referido a S. VI. A. C.
"Tartesos, ciudad de Iberia, nombrada del río que fluye de la montaña de la plata, río que arrastra también estaño en Tartesos"

Eustatio a Dionisio 337, referido al S. VI a.C.
"Dicen que el Betis es un río de Iberia que tiene dos desembocaduras en medio de las cuales, como en una isla, está la referida Tartesos, así llamada porque también el Betis se llamó Tartesos entre los antiguos. Y se indica que el rio Tarteso llevaba el estaño hasta allí.

S. I a.C. :
"Parece ser que en tiempos anteriores llamaron al Betis Tartesos..." [...] "Y como el río tiene dos desembocaduras, dícese también que la ciudad de Tartessos, homónima del río, estuvo edificada antiguamente en la tierra colocada entre ambas, siendo llamada esta región Tartéside." [...] "Los turdetanos tienen escritura...También los demás iberos tienen escritura, pero no la misma siendo también sus idiomas distintos"

Herodoro de Heraclea, año 500
"Esta gente Ibérica que habita á lo largo de la costa, es toda de una sola raza y se divide en tribus con diferentes nombres; primeramente los que viven en el extremo Occidente se llaman Kynetes; después de ellos, dirigiéndose al Norte, están los Gletes; después los Tartesios; luego los Elbysinos; á continuación los Mastienos; luego los Calpianos, y después el Ródano".

Esteban de Bizancio menciona varias ciudades tomándolas de Hecateo (560/540-480 a. C.).
Estas ciudades son: Calate, no lejos de las Columnas de Heracles; Elibriga; Manobosa, entre los mastienos; Sixo, también entre los mastienos; Molibdana, igualmente entre los mastienos, y Ligustine. Entre los pueblos del reino, cabe recordar a los iberos, los tartesios propiamente dichos, los gilbicenos, los cinetes, los mastienos, los bastetanos, los gimnetas, los maesesses, los etmaneos, los ileatas y los cempsios.

Arriano, Anábasis, II, 16.
Gerión, contra el que marchó el argivo Hércules, encargado por Euristeo para arrebatar las vacas de Gerión y llevarlas hasta Micenas, no es de la tierra de los iberos. El logógrafo Hecateo afinna que Hércules no fue a ninguna isla Eritea, fuera del gran mar; sino que Gerión llegó a ser rey de las tiertas alrededor de Ambracia y de los anfílocos. Ese sería el pais de donde Hércules se llevó las vacas. en proeza nada fåcil.


Segundo tratado entre Roma y Cartago del año 348 a. C.
"Sobre estas bases existe amistad entre los romanos y los aliados de los romanos con los cartagineses, tirios, uticenses y sus aliados. Más allá del Kalón Akrotérion y de Mastia de Tartesion, los romanos no podrán hacer presas ni comerciar ni fundar ciudades. Si los cartagineses se apoderasen de alguna ciudad del Lacio no sometida a los romanos, quedarán con el dinero y los cautivos pero dejarán la ciudad. Si los cartagineses se apoderasen de gentes con las cuales los romanos hubiesen pactado, aun cuando no estuviesen bajo el imperio de los romanos, no las llevarán a los puertos romanos y, si alguno fuera llevado y un romano se hiciera cargo de él, quedará libre. Lo mismo evitarán los cartagineses; si por el contrario, alguien lo hiciese, no se le perseguirá privadamente, sino que se considerará injuria pública. En Cerdeña y en Libia ningún romano comerciará ni establecerá poblados (ni se acercará), a no ser para aprovisionarse o para reparar sus naves. Si es llevado por una tempestad, en un plazo de cinco días debe marcharse. En la parte de Sicilia sometida a los cartagineses y en Cartago, un romano puede vender y hacer todo aquello que es lícito al ciudadano. Igual derecho tendrán los cartagineses en Roma".